Por: Vickyvananda
Y llegó la marea y una ola me invitó a danzar.
Y me quedé mirando a esa ola del mar.
Y vino otro día la marea y otra ola me invitó a la mar,
y mirándola le pregunté: ¿Hacia dónde vas?
Y absorta me quedé, en su silencio de amar.
Y vino otro nuevo día la marea y otra ola me llamó con su
canto,
y mirándola di un pasito, la sentí, me sumergí y ¡me atreví!
y así y de pronto, sin darme cuenta, me llevó a altamar…
Me llevó y me dejé llevar,
y escuché su canto, y pude danzar en sus
alas de mar,
y entre magia y asombro danzamos y cantamos con las sirenas del mar.
Y en ese instante, en ese instante se despojaron mis miedos, mis dolores,
y sin ansiedades me quedé, como en un vacío y como en un sin tiempo.
Suspendida me sentí en ese maravilloso amor de mar,
consciente de que "la vida, es dejarse llevar"…
Paso a pasito, despacito, con suavidad.
Dejarse llevar ahí donde todo se funde con el amor de mar.
El amor de mar pasa y pasa... en cada ola, en cada instante...
!sólo hay que dejarse llevar!